Los lanzadores cubanos hicieron sonar los cueros en el Tianmu Baseball Stadium de Taiwán y llevaron a la mayor de las Antillas a su primer triunfo en la IV Copa Mundial de béisbol sub 23, al vencer a los actuales subcampeones mexicanos 2-0, para mantener vivas sus aspiraciones clasificatorias.
Par de carreras en el séptimo episodio fue todo lo que necesitó el trio de serpentineros que el manager Alain Álvarez encaramó en el box para derrotar a los mariachis y tomar venganza de la derrota en el partido final del panamericano clasificatorio.
Un tremendo estacazo de dos bases del emergente capitalino Bryan González que trajo a un compañero a casa, y un lanzamiento salvaje del relevista José Luis Reyes con los ángulos congestionados, despertaron a una tropa que apenas había podido conectar un sencillo desde el segundo inning cuando dejaron las almohadillas repletas.
Un excelente relevo de Marlon Vega al colgar una argolla en el tercer capítulo cuando sus rivales le habían colocado corredores en las esquinas sin outs al abridor Alexander Valiente, fue clave en este triunfo. Luego retiró por su orden a los siguientes seis bateadores con cuatro ponches incluidos, para completar la faena.
La rumba buena la puso el pinareño Frank Abel Álvarez con su rescate de dos entradas donde solo le llegó un contrario a la primera base por boleto mientras retiraba a dos por la vía incómoda, válido para anotarse el triunfo en el desafío.
La derrota cayó en las espaldas del también relevista Yamil Castillo al bolear a los dos adversarios que enfrentó y luego anotaron, para estropear un trabajo fenomenal del abridor Esteban Bloch, quien había lanzado seis apartados inmaculados con cinco ponches recetados.
A pesar de la victoria las opciones de Cuba de pasar a la superrronda siguen siendo remotas, y la tarea es vencer a Australia en su último partido de la fase clasificatoria, y luego sentarse a esperar por los resultados de los otros juegos.
odh/ Texto y fotos tomadas del Facebook de Boris Luis Cabrera.
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