Dijo Fayad Jamís en unos versos que, de no existir La Habana, hubiéramos tenido que inventarla.
La bahía y sus botes. Foto: Enrique González (Enro)/Foto tomada de Cubadebate |
Texto Rosa Pérez López
Y de cualquier modo la habríamos dotado de su bahía fecundada de salitre y amores; de sus ronquidos de motores acompañando cada amanecer; de su techumbre de gorriones organizando los sonidos de los atardeceres; de su puntual voz de las nueve estremeciendo las noches desde una fortaleza.
Esa misma Habana que este 16 de noviembre llega a sus quinientos cinco años tras sufrir los embates de un ciclón que ha convocado la acción inmediata y solidaria de sus pobladores en las afectadas zonas del oeste de la capital de todos los cubanos.
Y cubanos de diversas provincias han venido también a esta ciudad para ayudar a resarcir los daños materiales y reafirmar las esperanzas que sólo son posibles en un país donde nadie ha de quedar desamparado.
No fue preciso inventar esa solidaridad, que es esencia del cubano y le brota a raudales siempre que ha sido necesario sin reparar en sacrificios ni esfuerzos, sean cuales sean, y que hoy mi Habana recibe agradecida; como le corresponde a una ciudad acostumbrada a hacerse y rehacese cada día con la entrega de los habaneros... no importa si por nacimiento o por adopción.
Pequeña ciudad que ha engrandecido su estatura en estos tiempos desafiantes, cuando lo hemos seguido dando todo por una capital que a todos los cubanos pertenece.
Atardecer en La Habana, Cuba. Foto: Abel Padrón Padilla/ Tomada de Cubadebate
Esta Ciudad Maravilla que, de haber tenido que inventar, la hubiéramos hecho tal cual es, con su sincrética convivencia de consignas y plegarias, de conciertos y bembés; con su afán de no renunciar jamás a su belleza y su alegría; con su diverso entramado de faenas cotidianas, en aras de procurar el bienestar y la felicidad de sus pobladores.
Trabajos de mantenimiento y sustitución de los adoquines, en la Plaza de Armas, en La Habana. Foto: Marcelino Vázquez Hernández/Tomada de Cubadebate. |
Maravillosa y entrañable ciudad que hoy recibe este nuevo cumpleaños encarando una compleja realidad y acariciando sus más hermosos sueños, que se tocan en el lugar exacto donde es posible hacer cierta la utopía de un mejor porvenir: el enamorado corazón de sus más fieles hijos, que lo seguimos dando todo por La Habana.
YVL
0 Comentarios
Con su comentario usted colabora en la gestión de contenidos y a mejorar nuestro trabajo