La Comisión Nacional, en acertada decisión, incorporará a la preselección nacional, ahora en 27 jugadores, a sus equipos en el certamen casero
Cuba no puede vivir sin la pelota. Por eso, todavía con los ecos de los play off de la II Liga Élite y los de la Serie de las Estrellas, marzo anuncia la temporada 2024. Pero ya los muchachos del Sub-15 y del Sub-18 están enfrascados en sus torneos nacionales, y las Pequeñas Ligas arrancan hoy su primera ronda, con 16 equipos envueltos en la trepidante eliminación directa.
Para la 63 Serie Nacional hay un cronograma de cada una de esas fases, desde el propio mes de marzo. Aunque la apertura se fijó para el día 9, en estos momentos, según Juan Reynaldo Pérez Pardo, comisionado nacional, «se hacen algunos análisis en torno a esa fecha». Lo que sí parece claro es que no sería nunca posterior a ella.
Lo que sí está definido es que se desarrolle de manera similar a la pasada edición, en la cual Las Tunas alcanzó su segunda corona. Es decir, 75 partidos para cada equipo, clasificándose ocho para la postemporada, que se jugaría en play off de siete a ganar cuatro, desde cuartos de final hasta la disputa del cetro.
Se valora si volver al formato de la temporada 61, cuando los equipos, para las subseries de cinco encuentros, se jugaban tres en casa y dos de visitador; o repetir el de la contienda anterior, con cotejos a cinco partidos. Si se adoptara esta última fórmula, más racional en el tema de transporte y del gasto de otros insumos, así como menos exigente para los peloteros, Pérez Pardo dijo que algunos conjuntos jugarían siete veces en su estadio y otros ocho, y que esa decisión respondería a la mejor ubicación en la pasada 62 Serie Nacional.
Carlos Martí, director de la Serie Nacional, anunció que los equipos tendrán 40 peloteros, 32 activos y ocho en la reserva, y que los primeros estarían disponibles para jugar cada choque. Preguntado sobre si eso era igual para el visitador, aclaró que la organización de la justa le garantiza al que se traslada los aseguramientos para 25 jugadores, pero si el elenco paga el resto, tendría a los 32.
Ejemplificó Martí que, si Artemisa se enfrenta a Industriales, y viaja con 32 y regresa a su hospedaje, pues también podría disponer de esa cantidad de efectivos. Lo mismo sucedería para enfrentamientos entre provincias cercanas que permitan ese proceder.
Sobre los contratados en el exterior, que ahora son 22 en Japón (8), Italia (8), Canadá (4) y México (2), estos pueden aparecer en las nóminas, permitiéndoseles altas a las plantillas por cada atleta en lides foráneas. Para reincorporarse se hace el proceso a la inversa.
Son algunos detalles de la ya cercana fiesta de las bolas y los strikes, que ahora ve a los jóvenes del Sub-15 y el Sub-18 en las segundas subseries de esos torneos. El de la categoría menor, con el incentivo del clasificatorio mundial de esa edad, en República Dominicana, a partir del 15 de marzo próximo.
La Comisión Nacional, en acertada decisión, incorporará a la preselección nacional, ahora en 27 jugadores, a sus equipos en el certamen casero. Ese paso les dará un plus adicional en su preparación, pues estarían cumpliendo una etapa en situación competitiva, que es mucho más que los 12 topes que han celebrado.
En plena efervescencia están las Pequeñas Ligas, una de las competencias que más emociones despiertan, por la manera en que se entrega el niño en cada batazo, jugada o lance. Es la edad en la que el mundo parece chiquito, y en el que se corre más que la misma pelota.
Hoy estarán los campeones de cada provincia en subseries de tres a ganar dos. Los vencedores son los únicos que avanzan. El monarca santiaguero, su municipio cabecera, recibe a Guantánamo; el titular nacional, Bayamo, a Holguín; Camagüey a Las Tunas; Sancti Spíritus al avileño Morón; Santa Clara a Cienfuegos; Matanzas al mayabequense Quivicán; Cerro a la Isla de la Juventud, y Pinar del Río al artemiseño San Antonio de los Baños.
Por/Oscar Sánchez Serra
odh