En La Habana existe una eficaz alternativa para desarrollar, a través de un sistema de actividades, la orientación especial en educandos con discapacidad intelectual. También una forma de diagnosticar la contaminación microbiológica del combustible de aviación, y un lubricante multiuso que bajo el nombre de Refilub -es similar al popularmente conocido aceite Tres Gotas-, sigue abriéndose paso en el ámbito industrial y busca ampliarse más en el doméstico.
Muchos elogios y reconocimientos no le han faltado a la opción de convertir un residuo de la actividad petrolera en materia prima, tan vital dentro de este estratégico sector; a la obtención de células madres de tejido adiposo por métodos mecánicos y a la posibilidad de prolongar el tubo orotraqueal en cirugías de cabeza y cuello.
No están todos los que son, como reza el viejo refrán, pero estos constituyen algunos ejemplos entre la infinidad de soluciones que las habaneras aportan cada día, como certero testimonio de su protagonismo en la vida económica y social de la ciudad.
Lo demostró el reciente Encuentro Provincial de Mujeres Creadoras de La Habana, organizado por la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (ANIR),donde 67 autoras defendieron 82 trabajos que remarcaron cuán alto es el grado de resolución ante determinado problema de la cotidianeidad, a partir de conjugar conocimientos, experiencia, método y alto rigor científico.
A los eventos previos de los quince municipios de la provincia, se llevaron más de 500 ponencias, que dan salida a prioridades de todos los sectores en frentes tan urgidos como suplir determinada importación, alcanzar mayor eficiencia en un proceso, extraer más frutos a una tecnología, lograr una transferencia tecnológica sustentado en las bien definidas líneas estratégicas trazadas por la máxima dirección del país.
Con creatividad innovadora y poder femenino, volvieron a lucirse en el certamen provincial, adonde arribó una depurada selección. Con sus mejores galas y sonrisas, arropadas de talento, se les vio empoderadas, proactivas y orgullosas de ser tenidas en cuenta y de saberse necesarias dentro de la ciencia para abordar sus principales desafíos. En esta ocasión los sectores más representados fueron Salud, Educación y Energía y Minas.
De aquí saldrán ahora los trabajos que representarán a la capital cubana en la cita nacional, entre octubre y noviembre del presente año. Pero ¿quién duda que ya todos resultan ganadores? Merecido lo tienen, desde que en un determinado centro una mujer puso a un lado sus múltiples cargas y no paró hasta hallar respuesta a un problema de su entorno inmediato.
Como en las precedentes, la actual edición del Encuentro Provincial de Mujeres Creadoras dejó más de una enseñanza: tan valiosa como la investigación capaz de generar impactos económicos respetables, es aquella aparentemente simple, cuyo valor recae en lo social y lo humano. Si no que lo digan los padres y familiares de pequeños pacientes sometidos a tratamiento oncológico, cuando estos reciben un libro diseñado con cuentos e imágenes para colorear, que les insuflan alegrías y valores.
Sirvan estos certámenes para imitar el ejemplo de las administraciones y estructuras sindicales dispuestas a escuchar y acompañar al trabajador deseoso de hacer realidad una iniciativa o proyecto, sea o no integrante de la ANIR, como ha reconocido su presidenta en La Habana, Katia Arencibia Guerra.
Igual para ponerle acento a un reclamo que ahora pongo en las palabras de una autora: La mayor felicidad será que todas nuestras soluciones se divulguen y apliquen, por que siempre habrá un rinconcito de Cuba que las necesita.
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