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El Plan Turquino requiere de una mayor atención y seguimiento por todos los Organismos de la Administración Central del Estado, y también por los gobiernos provinciales. Foto: Ismael Francisco
Recuperar la disciplina y consagración con
la cual fue creado, el 2 de junio de 1987, el Programa de atención al desarrollo
integral de las regiones montañosas, más conocido como Plan Turquino, es una prioridad,
afirmó ayer Jorge Luis Tapia Fonseca, vice primer ministro, en una reunión de trabajo
efectuada mediante videoconferencia, para conmemorar el aniversario 36 de esta iniciativa,
y analizar sus indicadores actuales.
En el encuentro –presidido por el general
de Cuerpo de Ejército Álvaro López Miera, miembro del Buró Político del Partido
y ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias– se presentó un informe sobre
la marcha del Plan Turquino, donde se contextualizó el propósito de este programa,
instituido por el General de Ejército Raúl Castro Ruz, y que es lograr un desarrollo
integral y sostenible de las regiones montañosas, conjugando armónicamente los requerimientos
productivos con el desarrollo social, conservación de la naturaleza y el fortalecimiento
de la defensa del país.
Se encuentran bajo la atención de la Comisión
Nacional del Plan Turquino 11 provincias, 54 municipios, 252 consejos populares
y mil 024 asentamientos con una población total de 676 683 habitantes.
Sobre la marcha de los principales renglones
en lo que va de año, se señaló que las producciones cafetaleras, cacaoteras, citrícolas,
de frutas, viandas y hortalizas, principales renglones productivos de las regiones
montañosas, no muestran signos de recuperación, lo que limita el poder adquisitivo
de sus habitantes y estimula la migración en busca de mejores condiciones de vida.
Igualmente, se reconoció que no todas las
formas productivas y productores cumplen los planes de siembra, producción y acopio
de los diferentes cultivos de la montaña.
En cuanto a la vivienda, se previeron 12
mil 037 acciones constructivas para este año, de las cuales se han realizado 351
hasta marzo. Las provincias que más avanzan son Artemisa, Pinar del Río y Cienfuegos,
y las más atrasadas son Guantánamo, Santiago de Cuba, Holguín, Matanzas, Villa Clara
y Sancti Spíritus.
Educación cuenta con 18 mil 018 escuelas
y una matrícula de 96 mil 700 estudiantes, lográndose un 98,18 % de retención escolar
y el 98,78 % en la promoción. Se garantiza la alimentación a todos los docentes
y aún existen 295 maestros viajeros, quienes se ven afectados por la situación del
transporte.
En la esfera de la Salud, el año 2022 se
cerró con 7,6 % de mortalidad infantil y 6,4 % de bajo peso al nacer, y se encuentran
en reparación 120 consultorios de los 147 planificados para este año.
De las 213 acciones planificadas por Recursos
Hidráulicos para la mejora del abasto y saneamiento del agua, se han concluido 69
hasta marzo; además, se han traspasado cinco sistemas de acueductos rurales, de
los 15 planificados.
En el servicio de energía eléctrica, se
recalcó en el informe que es necesario elevar la disponibilidad en las instalaciones
de fuentes renovables con energía fotovoltaica, a partir de los recursos en proceso
de importación, e incrementar en cuatro mil 383 viviendas las que se beneficiarían
con estos sistemas.
La transportación de pasajeros continúa
afectada por el deterioro de los caminos, déficit de neumáticos y piezas de repuesto
para los vehículos, y por el combustible en los últimos meses.
No obstante, a pesar de las insuficiencias
en la entrega de herramientas de trabajo y del bajo salario que perciben los operarios,
las brigadas manuales de camineros continúan trabajando en dar acceso a las comunidades
de las regiones montañosas.
Se señaló, como otro elemento negativo que
ha influido en el ámbito económico-productivo, la insuficiente liquidez financiera
de empresas y bases productivas para pagar con inmediatez a los productores, que
unido al déficit de la fuerza de trabajo hacen que la motivación de sus habitantes,
no esté aún en correspondencia con las medidas aprobadas por el Gobierno para dinamizar
las producciones agropecuarias.
También se advirtió sobre la marcada tendencia
en el incremento de hechos delictivos, fundamentalmente los considerados como comunes
(robo de café, hurto y sacrificio del ganado mayor y menor, producciones agrícolas
y propiedades personales) y los relacionados con el patrimonio natural e incendios
forestales.
Transformar es la palabra de orden
Luego del análisis de los indicadores, Tapia
Fonseca recalcó que este programa requiere, en los momentos actuales, de una mayor
atención y seguimiento por todos los organismos de la Administración Central del
Estado, y también por los gobiernos provinciales.
Para sostener un programa como este –enfatizó–
es necesario transformar el actual desempeño de los renglones productivos, que constituyen
la base económica de las regiones que abarca el Plan, como es el caso de la producciones
de café, cacao, coco y frutas, la apicultura y los recursos forestales, hoy muy
deprimidos.
Agregó que en ese empeño es preciso considerar
la fragilidad de los ecosistemas montañosos, poniendo énfasis en su preservación,
especialmente del suelo, el agua y los bosques, la invulnerabilidad defensiva y
la mitigación de los efectos del cambio climático.
El Vice primer ministro reiteró la urgencia
de resolver aspectos cruciales para las regiones montañosas como los lugares incomunicados,
el autoabastecimiento y la producción de alimentos. “Para que haya más agua, transporte,
educación, tiene que haber ingresos a la economía del país, y ese dinero tiene que
salir de la producción”, afirmó.
Señaló que queda un amplio terreno por recorrer
para llevar a vías de hecho el máximo propósito de la Revolución: alcanzar la sustentabilidad
del Plan Turquino, mejorar la calidad de vida y el confort de los montañeses y cenagueros,
y “continuar proclamando que las montañas de Cuba seguirán siendo un bastión inexpugnable
de la Revolución, que nunca podrán ser conquistadas por el enemigo”.
amss/Tomado de Granma
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