Por qué votamos

 



Por Rosa Pérez López

Este 26 de marzo nuevamente nuestro pueblo tiene la historia entre

sus manos, en el acto responsable de garantizar ante las urnas el

destino de la Patria.


Y no se trata tan sólo del sencillo gesto de emitir su voto unido. Se

trata de cumplir conscientemente su compromiso de lealtad con

quienes iniciaron el camino de lucha que nos ha elevado a nuestra

condición de nación independiente y soberana. Se trata de

preservar los valores que sostienen nuestros sueños y nuestra

identidad, y de salvaguardar las conquistas donde se expresa el

ideal de justicia social al que jamás renunciaremos.


Quienes hoy concurren a las urnas suscriben con su votación su

apego al legado de los fundadores y su culto a las esperanzas de

todos los continuadores. Son el anciano de vejez segura, que

refrenda con su voto venerable el reconocimiento a una obra que lo

protege y dignifica; el obrero que cada día forja el mañana en su

taller, y hoy hace de una boleta su herramienta mejor; el campesino

que le arranca riquezas a la tierra, y convierte su voto en la simiente

más fecunda; el artista y el intelectual que interpretan y recrean la

realidad, y hoy votan como si consumaran su más noble acto de

creación; la mujer que expresa su gratitud por sus hijos a salvo de

la insalubridad, la ignorancia y el desamparo, cualesquiera que

sean su sexo, su género, su credo y el color de su piel; el

adolescente que hasta hace muy poco escoltara la pureza de las

urnas, y hoy estrena su madurez ciudadana ejerciendo, más que un

voto, su confianza absoluta en un mejor porvenir.


Nuestra historia tantas veces fraguada en trincheras, fábricas,

laboratorios, escuelas, surcos y hospitales, hoy se escribe con la

solemne sencllez de los actos trascendentes sobre las boletas

donde aparecen los nombres de los candidatos a diputados de la

Asamblea Nacional del Poder Popular. Consagrados hombres y

mujeres surgidos de ese pueblo que este 26 de marzo tiene la

historia entre sus manos, y una vez más será protagonista de una

de sus páginas más democráticas, decisivas y admirables.

nyr

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