Con un tuitazo, a favor de las buenas prácticas y las conductas responsables en la vía, comienza este domingo la quincuagésima novena (59) edición de la Jornada Nacional del Tránsito, de las más antiguas y justificadas campañas entre todas las que, en favor de nobles causas, han tenido o tiene lugar en el país.

En esta ocasión, tan loable y meritoria cruzada por la vida, se desarrollará a lo largo y ancho de toda la Isla, con una primera etapa hasta el 12 venidero, a nivel de municipios; la cual dará paso a unas segunda, con las actividades de carácter provincial (13-19 de noviembre), para luego cerrar con el programa nacional, a desarrollarse del 20 al 26, del presente mes.  

Luego de insistir que, en tanto escenario donde discurre la existencia, el éxito o el fracaso se decide en la localidad y en consecuencia es menester no menoscabar ni restarle importancia ni prioridad al programa que allí se organice, el coronel Roberto Rodríguez Fernández, jefe del Órgano Especial de Tránsito (OET), de la Dirección General de la Policía Nacional Revolucionaria (DGPNR), explicó que con la premisa de crear conciencia y promover la observancia y acatamiento de las regulaciones establecidas para el movimiento y la circulación vial, la Jornada, de manera general en todas las instancias, incluye charlas, conversatorios, talleres, videoconferencias, exposiciones, demostraciones de la técnica y habilidades, barrio-debates, y otras acciones educativas, que harán hincapié en niños, adolescentes y jóvenes, contarán con la participación de instructores y profesores, agentes del orden vial, choferes y población en general, y tendrán lugar lo mismo hacia lo interno (unidades del MININT y las FAR) como en centros de trabajo, planteles docentes, y comunidades.

Tiene consecuencia (no respetar el derecho de vía, conducir bajo los efectos de bebidas alcohólicas, entretenerse cuando se está detrás de un timón o cualquier otra infracción) es la premisa que en esta ocasión preside el programa, que prevé asimismo acciones de control en puntos de alta concentración automovilística y movimiento masivo de peatones, además de la premiación a los ganadores del concurso infantil “La Familia y el Tránsito” (en provincias y nación) y el estímulo y reconocimiento a choferes profesionales con una ejecutoria laboral de larga data, sin la sombra oscura de percances de tránsito.    

Entre las actividades que, en el marco de la Jornada, realizarán los capitalinos y despiertan gran interés figuran dos talleres: sobre seguridad vial y salud del trabajo, organizado (modalidad virtual) por el Grupo Empresarial de la Informática y las Comunicaciones, del MICOM, y otro promotor del intercambio de experiencias entre las escuelas de Educación Vial, con la participación de sus docentes, cuentapropistas que ejercen como profesores de la especialidad, e instructores de la Academia de la PNR.

Por su singularidad e importancia también sobresalen los Festivales de Tránsito, que tendrán lugar en los barrios, con la concurrencia de la totalidad o la mayoría de los organismos e instituciones que intervienen en la gestión de la Seguridad Vial, y cuyos representantes interactuarán con los vecinos del barrio, una experiencia puesta en práctica por los habaneros, que ahora se extiende a otras provincias del país.

Entre las novedades también aparece la  vinculación del Marabana y la Jornada; también  el Encuentro Académico, que auspiciado por la Comisión Nacional de Seguridad Vial y la universidad Tecnológica de La Habana (CUJAE), prevé el debate de ponencias que  constituyen alternativas de solución a  muchas de las carencias que lastran y limitan el fortalecimiento de la Seguridad Vial en la Isla, mencionemos, por poner solo dos ejemplos, software que simulan probables accidentes de tránsito en determinadas condiciones (digamos deterioro vial u otras variantes), y propuesta de un semáforo de factura nacional, en fase avanzada de desarrollo.

Lamentablemente, cuando, al cierre del noveno mes del año, el país experimenta un incremento de los tres indicadores que miden la accidentalidad: hechos, muertos y lesionados, comparado con igual etapa del 2020 y 2021, con siete mil 302, 507 y cinco mil 400, respectivamente a nivel de país, la capital forma parte del grupo de las cuatro provincias con mayores crecimientos (dos mil 647, 81 y mil 104, en ese mismo orden  574, 33 y 300 más).

Sin embargo, resulta un tanto halagüeño que la etapa tomada como referencia no es representativa por ser un período que dada la pandemia, hubo poca movilidad, mientras que al establecer un paralelo con los 24 meses precedentes (2017-18), bajo condiciones de normalidad) las cifras representan un decrecimiento.

Asimismo resulta alentador que, con independencia de su condición de capital, proporcionalmente la provincia  disminuye el índice de fallecidos por accidente.

Entre las causas de mayor incidencia vuelven a puntear la atención deficiente al control del vehículo, irrespeto al dere3choo de vía, exceso de velocidad, desperfectos técnicos, infracciones de los peatones e ingestión de bebidas alcohólicas.

nyr/Tribuna de La Habana