La revista de los estudiantes universitarios cubanos cumple 100 años este 18 de noviembre. Foto: José M. Correa Armas
Corría el 18 de noviembre
de 1922 cuando comenzó a circular el primer número de la revista Alma Mater. El sueño de Julio Antonio Mella, hecho papel y
tinta, le dio voz a un sector que siempre ha sido protagonista de la rebeldía en Cuba: los universitarios.
Mella, joven líder
revolucionario, reconoció el valor de tener un medio de prensa para explicar y
visibilizar su causa, como lo hiciera antes Martí al crear Patria. Las ideas de
los estudiantes que exigían reformas en la Universidad de La Habana, en aquel entonces
única institución de este tipo en el país, se publicaban sin censuras en las
páginas que responderían a la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU),
fundada un mes después.
“Laboraremos por la unión
de todos los estudiantes cubanos en una Federación que nos haga fuertes y
capaces para defender nuestros derechos, para progresar; para aprender cuando
jóvenes las conveniencias de la hermandad, de la unión”, escribió su fundador
en aquel primer número, en un texto titulado Nuestro credo.
Su eslogan, La revista joven más antigua de Cuba,
hace justicia a cada uno de estos 100 años de historia. Siempre ha tenido un
estilo fresco, más cercano al lenguaje coloquial y desenfadado de su público
objetivo, que al literario y encumbrado de otras revistas surgidas en la misma
época.
Según pasaron las
décadas, se fue rejuveneciendo con cada nueva generación, siempre en busca de
provocar el pensamiento crítico y el debate entre sus lectores.
Grandes nombres de la
historia y el periodismo firmaron en sus páginas: Mario Kuchilán, Pablo de la
Torriente Brau, Rafael García Bárcenas, Raúl Roa, Manuel Bisbé y Antonio
Iraizoz, entre muchos otros.
Su edición en este siglo
de existencia no fue constante, pues tuvo pausas de varios años; y durante la
dictadura de Fulgencio Batista circulaba esporádicamente, de forma clandestina.
Estudiantes, profesores,
reconocidos intelectuales, discretos colaboradores que firman con seudónimos…
entre todos, artículo por artículo, fueron conformando el legado que hoy llega
a nosotros: un medio respetado que ha
reflejado al pie de la letra la realidad de Cuba y las preocupaciones de sus
juventudes.
Actualmente perteneciente a la Casa
Editora Abril, continúa con una versión impresa bimensual. Sin embargo, su
trabajo en los últimos años se ha enfocado en las plataformas digitales,
decisión acertada; pues estas son las fuentes más consultadas por aquellos que
hoy acuden a los diferentes centros de altos estudios.
Este enfoque multimedial también ha
hecho crecer la audiencia fuera del público meta original.
amss/Tomado de Granma
0 Comentarios
Con su comentario usted colabora en la gestión de contenidos y a mejorar nuestro trabajo