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Foto: Ariel Cecilio Lemus |
Luego de cuatro años fuera de escena, la prestigiosa cita regresa para celebrar, en esta ocasión, el aniversario 75 de la compañía anfitriona, el Ballet Nacional de Cuba (BNC). Su directora general y primera bailarina, Viengsay Valdés, preside esta fiesta coreográfica que halla espacio en los teatros Nacional, en La Habana; Sauto, en Matanzas; y Tomás Terry, en Cienfuegos.
El desfile, con alumnos de la Escuela Nacional del Ballet Fernando Alonso y del Taller Vocacional de la Cátedra de Danza del Ballet Nacional de Cuba, e integrantes del BNC, dio inicio a la gala en la que se exhibió un tributo fílmico a cargo de Ahmed Piñeiro Fernández.
Las palabras de bienvenida estuvieron a cargo de Aurora Bosch, una de las cuatro joyas de nuestro ballet. En su intervención, la maestra recordó a los tres fundadores del BNC: Alicia, Alberto y Fernando Alonso; y se refirió a la impronta de este festival que forma parte de las raíces de la cultura nacional.
Por su parte, Viengsay Valdés comentó al público que por estos días la danza reinará como uno de los mayores logros de la cultura en nuestro país, y anunció su regreso a la escena.
La Séptima Sinfonía (coreografía y vestuario de Uwe Scholz), protagonizada por Anette Delgado y Dani Hernández, como pareja principal, junto a otros bailarines, fue el regalo de la noche, para dejar abiertas las puertas a la danza.
En la ceremonia se encontraban Rogelio Polanco Fuentes, miembro del Secretariado del Comité Central y Jefe de su Departamento Ideológico; la vice primera ministra Inés María Chapman Waugh; y Alpidio Alonso Grau, ministro de Cultura.
amss/Tomado de Granma
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