La Semana Internacional de la Ciencia y de la Paz, que transcurre por estos días, fue celebrada por primera vez en 1986, con el objetivo de promover estos temas y generar conciencia sobre la relación entre ellos a nivel global.
| Foto tomada del sitio digital gstatic.com |
Texto Richard Ruiz Julién
Durante la jornada, se pretende integrar a Estados, organizaciones intergubernamentales y no gubernamentales, instituciones, asociaciones y a la ciudadanía en general en el estudio y la difusión de información sobre los vínculos entre el progreso científico y tecnológico y el mantenimiento de la paz y la seguridad.
También se busca reforzar la cooperación internacional entre los científicos.
Un mayor acercamiento de la ciencia a la sociedad posibilita que las personas tengan los conocimientos necesarios para elegir sus opciones profesionales, personales y políticas, y utilizarla, además, como herramienta para comprender el mundo que les rodea.
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| Foto tomada del sitio digital diainternacionalde.com |
Los avances científicos abren las puertas a nuevas soluciones ante los desafíos económicos, sociales y medioambientales y contribuyen a la construcción de la paz, al fomentar alianzas para alcanzar el desarrollo sostenible.
La fecha emergió como una iniciativa no gubernamental que formaba parte del Año Internacional de la Paz, hace casi 40 años.
Debido a su éxito, en 1988 la Asamblea General de la ONU declaró oficialmente la Semana Internacional de la Ciencia y la Paz, la cual tendría lugar todos los años durante la semana del 11 de noviembre.
La celebración anual de esta Semana Internacional contribuye considerablemente a la promoción de la paz y fomenta un intercambio académico sobre un tema de importancia universal.
YVL
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