La cubana Leyanis Pérez no defraudó: es la nueva campeona mundial del triple salto y lo hizo con 14,94 metros.

Foto Panam Sports/Tomada de JIT
En el Estadio Nacional de Tokio estaban todas las mujeres importantes de la especialidad, la venezolana Yulimar Rojas venía a defender una corona que era suya desde Londres 2017, la dominiquesa campeona olímpica de París 2024 Thea Lafond quería añadir historia a su palmarés y la también cubana Liadagmis Povea llegaba también entre las dispuestas a buscar un premio.
Todas confirmaron las expectativas… se ubicaron en los cuatro primeros puestos, pero el oro fue de Leyanis Pérez que no dejó espacios a las dudas desde el mismo primer intento.
La alumna de Ricardo Ponce abrió con 14,85 metros y eso hubiera bastado para colgarse su primer oro en estos certámenes.
Sin embargo, creció en casi todas sus salidas para completar una secuencia de 14,90 y el triunfador 14,94 en el cuarto y sexto intentos, anotado como mejor marca de la temporada al aire libre, además de tres foul.
Hace dos años en Budapest había quedado en bronce –incluso con mejor registro de 14,96– y no importa la marca, que también es muy buena, el detalle es la corona y esa es suya.
«A esto fue lo que vine, a buscar el oro y una gran secuencia de saltos. Estoy feliz, pero no complacida porque también quería la barrera de los 15 metros y no se pudo», aseguró Leyanis al colega Javier Clavelo.
En el mismo escenario que en 2021 no logró debutar en unos Juegos Olímpicos por lesión, la pinareña venció esta vez y lo hizo en una prueba con matices.
El regreso a la competencia de la incomparable Yulimar, quien luego de dos años sin competir sube al podio de bronce con 14,76 metros.
«Es una satisfacción bien grande que Yulimar esté aquí y en buena forma, creo que aunque venía a revalidar su título, el irse con bronce debe darle también alegrías», confesó la también reina mundial bajo techo desde marzo pasado.
La medalla de plata fue para Lafond con 14,89 en su sexto salto y el cuarto puesto lo consiguió Povea, otra vez en una competencia grande con registro tope de 14,72 metros.
Aunque sin subir al podio, la dirigida por Yoelbi Quesada merece todos los aplausos, confirmó que es una mujer crecida en momentos claves. Su secuencia incluyó otros tres saltos por encima de los 14,60 metros y con ese resultado se reafirma entre las mejores de la especialidad.
Cuba no lograba un cetro mundial desde Doha 2019 cuando reinó Yaimé Pérez en el lanzamiento del disco, pero en el triple salto específicamente no conseguía oro desde Berlín 2009 con Yargeris Savigne (también campeona en Osaka 2007).
Tomado de JIT
YVL
0 Comentarios
Con su comentario usted colabora en la gestión de contenidos y a mejorar nuestro trabajo