Con buena productividad en los dos innings finales, el subcampeón Matanzas supo venir de abajo para vencer hoy 4-1 al monarca exponente del béisbol cubano, Granma, e igualar el pareo entre ambos (1-1), para continuar las acciones el venidero martes en su feudo del estadio Victoria de Girón.
En el parque bayamés Mártires de Barbados hubo un interesante duelo de zurdos entre el granmense Leandro Martínez y el matancero Yamichel Pérez, quienes supieron mover bien sus envíos, que apenas colindaron con el centro del plato y se dificultaron sobremanera para los bates y contactos rivales.
Los Alazanes de Granma abrieron el marcador en el final del séptimo inning luego de dos outs, por jit de Alexquemer Sánchez, unido a un lanzamiento desviado de Yamichel que lo condujo hasta la tercera base y desde donde anotó en jugada continuada por error en tiro del receptor Roberto Loredo.
Pero en el béisbol también hay revanchas. En el octavo arriba, los saurios se fueron delante con par de carreras, la primera remolcada por doblete de Yariel Duque como emergente frente al primer relevista Carlos Santana, y la segunda por imparable de Loredo frente al segundo rescatista Joel Mojena.
Los Cocodrilos apuntalaron el triunfo con otro par de anotaciones en el noveno acto, también después de dos outs en el pizarrón, con saldo de tres imparables y una base por bolas intencional al recién aparecido Yadir Drake, que retornó a Cuba aprovechando las actividades por el Juego de las Estrellas en la Liga Profesional de México.
La victoria fue para Noervys Entenza, quien lanzó 2.1 innings de relevo, con cota de tres sencillos y un boleto.
En semifinales contra los Gallos espirituanos, el diestro matancero tuvo participación en tres de los cuatro triunfos de su equipo, merced a dos victorias y un salvamento, por lo que se ha convertido en un real paño de lágrimas para el mentor Armando Ferrer.
Y aunque se saborea el triunfo, es preciso citar que los Cocodrilos dejaron a 14 corredores sobre las almohadillas, ya que no aprovecharon sus 11 jits y las ocho bases por bolas otorgadas entre los siete lanzadores rivales.
Con este fracaso quedó rota la racha de 12 victorias consecutivas de los Alazanes como anfitriones en postemporadas. Por tanto, no pudieron igualar el récord de 13 en poder de la aplanadora de Santiago de Cuba entre las campañas de 2007-2008 bajo la égida del mentor Antonio Pacheco.
odh/ACN
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